miércoles, 21 de enero de 2009

Riesgo de decepción por altas expectativas en Obama

Las altas expectativas generadas en el mundo por el “ascenso fulgurante” de Barak Obama a la Casa Blanca podrían transformarse en decepción si éste muestra incapacidad para transformar la realidad. “La historia de las democracias ofrece pocos ejemplos de un ascenso tan fulgurante, menos aún cuando viene acompañado de tamaño fervor popular y suscita tantas esperanzas en Estados Unidos y en el mundo”. A unas horas de que el primer presidente afroamericano de Estados Unidos sea juramentado, las expectativas en Obama puede reservarle una “caída meteórica si se muestra incapaz de transformar en sólida realidad los cuentos de hadas de los que es héroe”. La Libre Belgique (diario) subrayó que “esperamos de Obama que finalice la integración racial en Estados Unidos y que lleve la paz a Oriente Medio”. “Que saque a Estados Unidos, y al mundo, de la recesión y salve al planeta del desastre ecológico anunciado. Que devuelva a los estadunidenses las casas que la crisis de las hipotecas les ha quitado y que proteja a Darfur del genocidio”, agregó. “Que reforme los sistemas educativo y sanitario estadunidenses y que impulse las negociaciones de Doha”, enlistó el rotativo en su editorial. Sobre las espaldas del nuevo presidente estadunidense pesa “la esperanza ansiosa de millones que esperan de él un milagro”, señaló. Indicó que lo más “impresionante” es que Obama “piensa realmente que le puede hacer y da la impresión de querer lograrlo”, y el mundo tiene motivos para creerle. “Está aconsejado por gente brillante, puede contar con en el apoyo del Senado y de la Cámara, donde su partido dispone de una confortable mayoría”, apuntó el rotativo. Además, podrá culpar a su predecesor George W. Bush por “casi todo que no vaya bien” y tiene la ventaja que “el país que él encabezará difícilmente se portará peor que éste, desorientado, que él hereda hoy”, consideró. “Aun así, será necesario que las disputas de ego no arruinen los esfuerzos y los proyectos”, señaló el editorial.

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