jueves, 29 de mayo de 2008
Alejandro Madrigal, científico mexicano
El científico -uno de los principales investigadores del mundo en el campo de inmunología y trasplantes de células madre de médula ósea- es director del Instituto de Investigación de la Fundación Anthony Nolan en Londres.
También es profesor de hematología del Hospital Royal Free de la Universidad de Londres. "Para mí descubrir la medicina fue algo de los más bello que pasó por mi vida". "Tal como lo dijo Pablo Neruda: "fue a esa edad que la poesía llegó a buscarme, yo no sabía pero me esperaba en las esquinas...". "Para mí la medicina no es un trabajo, es una devoción, una pasión y prácticamente una religión".
"Lo que uno puede hacer con la medicina es enorme porque uno puede cambiar la vida de mucha gente, no sólo de pacientes, sino colegas, estudiantes, etc."
Alejandro Madrigal estudió la carrera de medicina en la Universidad Nacional Autónoma de México. Posteriormente obtuvo una beca de la Organización Mundial de la Salud para estudiar en la Universidad de Harvard en el laboratorio del profesor Edmundo Yunis, destacado científico en la investigación de inmunología y cáncer.
En 1985 fue becado por la institución británica Imperial Cancer Research para realizar estudios doctorales en genética molecular en las Universidades de Londres y de Oxford. Y desde hace 13 años dirige el Instituto de la Fundación Anthony Nolan en Londres.
La Fundación Anthony Nolan fue el primer registro internacional de donantes de médula ósea establecido en el mundo para el tratamiento de leucemia y otros tipos de cáncer. "Tenemos registrados 400.000 donantes voluntarios en todo el mundo que en un momento dado los podemos llamar y darle la posibilidad de vida a algún paciente", señala el investigador. El centro de investigación Anthony Nolan, fundado en 1993 por el profesor Madrigal, está enfocado principalmente al estudio y mejoramiento de los factores que afectan el resultado de dichos trasplantes.
Entre éstos, están las diferencias en los antígenos de leucocitos humanos entre individuos genéticamente distintos y las infecciones virales.
"Un rechazo en este tipo de trasplantes no es igual al rechazo de un órgano que puede ocurrir con riñones u otros tejidos donde podemos inmuno-suprimir al paciente", explica el científico. "Aquí el rechazo es del trasplante al paciente -la llamada enfermedad de injerto contra huésped- y si ocurre el rechazo porque el donante no es idéntico al paciente a nivel molecular, puede ser severo y fatal".
El científico mexicano es uno de los principales investigadores del mundo en el trasplante de donantes no relacionados de médula ósea. Cuando se busca un donante de médula ósea se recurre en primer lugar a los hermanos del paciente, que son los únicos que pueden tener la característica genética de igualdad. Sin embargo, tal como explica el experto "las posibilidades de encontrar un donante relacionado al paciente son de un 25%". "En los casos en los que desafortunadamente los hermanos del paciente no son idénticos, debemos buscar un donante no relacionado".
"Afortunadamente lo que empezó la Fundación Anthony Nolan se diseminó y actualmente hay unos 10 o 12 millones de donantes en registros de todo el mundo".
La labor del científico mexicano en este campo lo ha llevado también a América Latina donde ha asesorado a instituciones de salud en la creación de registros de donantes de sangre y médula ósea en la región.
"Son bancos que ofrecen la posibilidad de darle una opción a pacientes con leucemia, cáncer y varias otras enfermedades", dice el experto.
Pero ¿ha sido difícil llegar hasta aquí, cuando hoy en día todavía existe una gran brecha en la investigación científica del mundo desarrollado y los países en desarrollo?
"En una carrera como ésta en la que hay que estar logrando avances científicos que tengan sobre todo una orientación a curar a pacientes, el reto es bastante serio" dice Alejandro Madrigal. "Pero cuando uno compite a los niveles de excelencia que se requieren nacional o internacionalmente, las fronteras no existen" afirma. "Y gracias a ello la comunidad médica y científica internacional me ha aceptado". "Lo importante es no esperar el reconocimiento, sino trabajar y si sucede, un día las cosas van a ocurrir", Además de dirigir el Anthony Nolan, el científico preside el Grupo de Trabajo de Inmunología del Grupo Europeo para el Trasplante de Sangre y Médula Ósea (EBMT).
Y recientemente fue nombrado coordinador del programa Allostem, un proyecto financiado por la Unión Europea para estudios de inmunoterapia y células cancerosas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario